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Esta fruta proviene del árbol llamado mandarino. La mandarina tiene un sabor mayoritariamente ácido, aunque depende la temporada o del árbol que la hayan recolectado, a veces se obtienen algunas mandarinas que tienen un sabor algo dulce, sin perder del todo esa acidez. Esta fruta contiene mucha vitamina C, aceites esenciales, etc. Es el cítrico más parecido a la naranja.
Conoce sus propiedades.
Las mandarinas son unas potentes antioxidantes del organismo. Además de reforzar nuestro sistema inmunitario.
Esta fruta previene las enfermedades degenerativas que pueden ser consecuencia de una deficiencia de vitaminas, pero sobretodo de la vitamina C. El consumo de esta fruta durante el tratamiento en que se encuentran algunas personas que están en dieta, para sentirse mejor consigo mismo o para combatir la obesidad, es muy positivo ya que el aporte de esta vitamina hace que tengas sensación de saciedad.
Facilita la absorción del hierro por lo que es un suplemento perfecto en los tratamientos contra la anemia ferropénica.
Es muy útil como prevención de estreñimiento, cáncer de colon y enfermedades cardiovasculares ya que contiene fibra.
Por su semejanza a la naranja y su gran cantidad de vitamina C, es muy recomendable consumirla en las temporadas en las que nos encontramos flojos, con pocas energías, o si tenemos la gripe, resfriados y catarros.
Haciendo zumo de esta fruta, usando tres o cuatro unidades con una cucharadita de miel, en el caso de que no tengamos naranjas, es un aporte importante de vitaminas y minerales para empezar bien el día, con más fuerzas.
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